Por Rogelio León Guzmán
Mediante esta carta quiero agradecer a todos y cada uno de ustedes por pertenecer a esta gran familia: AEA “los orgánicos”. ¿Qué seríamos sin ustedes, queridos amigos?-¿quizás no tendríamos rumbo? O tal vez, seríamos un grupo álgido sin nada distintivo.
Gracias a ti Eder por tu fortaleza y convicción por sentar las bases de lo que hoy somos.
A Maicol y Tony, por demostrarnos que podemos ser capaces de lograr metas muy altas y construir la esperanza en nuestros actos,
A Luis Ramírez, por su continua presencia en el huerto, tu apoyo incondicional, tu sincera amistad y tu buen desempeño en las finanzas del grupo.
A todos aquellos que ya terminaron, pero que su paso dejo una huella muy importante en el grupo; en especial a ustedes: Guillermo, Fredy y Blas.
Gracias también a la primera generación, de los cuales de seguro me olvidaré de nombrar a muchos pero saben bien, lo importante que son para nosotros: Charito, Jorge, favio, julius, Panchito, Gaby, el Abuelito, Victor, Chugo, Ester. Cada uno de los ustedes aportó con su cualidad natural al enriquecimiento espiritual del grupo y eso desde ya es un gran aporte.
Gracias también analú, por tu alegría contagiosa, pues aunque tristes y cansados, con solo verte siempre sonreír, renovabas instantáneamente nuestras fuerzas.
Gracias, amigo Juancho, por tu empeño y tu voz sonora. No podríamos decir que el grupo tiene convicción si no fuera por ti.
A Evelyn porque fuiste tú la persona que nos enseñó lo que en verdad significa la palabra “amistad”.
A Lady, por su apoyo incondicional, por sus graffitis tan peculiares que siempre muestran una eterna sonrisa y siempre llenos de una magia indescifrable que es su vivo reflejo: siempre desafiante al aspecto negativo de la vida y ese “oseeea tuu” tan motivador; también por permitirnos ingresar, como grupo, a la era digital, con la creación de nuestro blog.
A Sayuri, por ser tan empeñosa, y su amor por nuestro querido Pepa. Sabemos muy bien cuanto quieres a los tomates y los cuidas con tanto afán, por eso muchas gracias.
A Pavel por su entrega constante, sus observaciones siempre tan necesarias y por generar siempre ideas innovadoras, que tanto necesitamos.
A Ivanna, por contagiarnos siempre con su alegría y darle al grupo la música, aunque no a todos nos guste sus “latin”, igual nos entretiene cuando realizamos las labores.
A Yoselin, por sus evaluaciones en el pepa, su compañerismo y por brindarnos siempre ese impulso que tanto necesitamos para hacer grandes cosas.
A Alex por su peculiar Domingo, domingo, domingo. Sus aptitudes deportivas que varias veces casi nos llevan al campeonato, y también por tu siempre presencia cuando te necesitamos en las labores.
A Lukas, por su preocupación por la sociedad, justicia y por creer que todos somos hermanos. Tus ideales le dan vida y alma al objetivo de nuestra orientación: la agricultura orgánica, pues nos enseñas a concebirla no como herramienta para generar riqueza sino para dar igualdad de oportunidades.
A Iván, Por ser siempre tan carismático, por estar siempre ahí poniendo el hombro escuchándonos y apoyándonos como buen amigo que eres, Notamos también que muy pronto tus aportes serán trascendentales para el grupo y eso tu, también lo sabes bien.
A Carmencita, porque usted, generó que muchos de nosotros ingresemos al grupo, por fomentar la integración, el compañerismo, en fin, todas esas cualidades necesarias para forjar la amistad pero que es necesario aprender de otros, por eso gracias también.
Gracias Luis burgos, Rodrigo, Diego y Sebastián, por confiar en nosotros y unirse a este, su grupo.
Gracias también a las personas que pronto se incorporaran, ustedes queridos hermanos tengan la plena confianza de que nunca los defraudaremos y que siempre trabajaremos juntos para aprender cada día, ser mejores personas, mejores amigos, para nuestras familias, nuestra universidad , y nuestro país.
Gracias nuevamente a todos, amigos, colegas. Son ustedes los que forjan día a día, esta hermosa revolución llamada agricultura orgánica, Al escribir esto, sé muy bien que me estoy olvidando de nombrar a muchos, por favor, discúlpenme pero como ya dije líneas arriba, ustedes son tan importantes como los que aparecen en la lista.
NO podría cerrar esto, sin agradecer al huerto, por brindarnos a puertas abiertas la oportunidad de aprender, equivocándonos muchas veces; pero ustedes con una paciencia de padres nos daban una y otra oportunidad.
Gracias Profesor Ugás, por ser nuestro guía. Para nosotros, decirle profesor significa mucho más que sus títulos, pues fue usted, quien en Agroecología, Olericultura y agricultura orgánica nos enseñó la otra cara de la agricultura, sensible y humana.
Gracias a S. Siura e I. Montes, nuestras maestras que fueron nuestro primer nexo con el huerto, por soportarnos y tan comprensivas, estar siempre para absolver nuestras dudas.
Gracias a la Srta. Paty, porque tan amable, como es ella nos brinda siempre las facilidades necesarias con las herramientas.
Gracias Willy por tu apoyo técnico, a la sra. Rufina y a todas las personas que laboran en el huerto que con su pujanza nos motivan a seguir adelante.